Retención de agua de lluvia
Las cubiertas ecológicas contribuyen a la retención del agua de lluvia. Una cubierta ajardinada puede almacenar entre el 50 y el 90% del agua de lluvia y cederla gradualmente, parte por evapotranspiración y parte a la red de alcantarillado.
Efecto isla de calor.
Las superficies con cubiertas ecológicas contribuyen a rebajar el efecto "isla de calor" de nuestras ciudades ya que consumen parte de la energía calórica con la evapotranspiración.
Reducción de los niveles de contaminación.
Un metro cuadrado de cubierta ecológica puede filtrar hasta 0,2 kg de partículas de polvo en suspensión por año.
Creación de nuevos espacios habitados por animales y plantas.
Las cubiertas ecológicas pueden compensar parte de las áreas verdes perdidas para la construcción de edificios y crear oasis en medio de los estériles centros de nuestras ciudades. Muchos insectos, pájaros y plantas pueden encontrar refugio en espacios anteriormente perdidos por la naturaleza .
Mejora del paisaje urbano.
Las cubiertas ajardinadas son la solución a la alta densidad de edificación de la mayoría de nuestras ciudades. En un momento en que el precio de los terrenos se ha convertido en un motivo que dificulta la creación de zonas verdes, no deberíamos olvidar los miles de m2 perdidos sobre los edificios.
El paisaje de nuestras ciudades podría cambiar de forma sustancial si parte de las actuales cubiertas con acabado de gravas se transformasen en cubiertas verdes.